Las Universidades se sitúan en la vanguardia del conocimiento científico-técnico y deben de investigar y formar a nuevos profesionales en temas tan importantes como la adapatación y el cambio del modelo energético.

La transformación climática asociada a las emisiones de CO2 hará que los sistemas tanto naturales como los socio-económicos, y sus recursos asociados se vean afectados, ya que la inercia climática que arrastra el sistema es demasiado grande como para evitarla completamente, incluso con políticas internacionales de mitigación muy ambiciosas. Por ello, existen planes y estrategias que tratan de minimizar estos previsibles impactos, tanto a nivel internacional como regional.

En el momento de crisis económica global, el cambio hacia un modelo energético más respetuoso con el medio ambiente, menos emisor de CO2 y más eficiente, basado en las energías renovables, está siendo discutido tanto en las cumbres internacionales, como en los parlamentos de las naciones.


Si no se toman las medidas adecuadas, los impactos afectarán en el futuro elementos vitales del desarrollo. Esto se ve de una forma gráfica en el caso de las infraestructuras de transporte, ya que pueden ser dañadas por los fenómenos climáticos extremos, produciendo un enorme gasto para las administraciones. Del mismo modo, la estabilidad económica de ciertas poblaciones locales podría estar amenazada por el cambio climático en forma de efectos adversos para la salud o inundaciones y sequías.

Estas jornadas están dirigidas a profesores de universidad y estudiantes universitarios cuyos estudios estén relacionados con temas de energía, medio ambiente y cambio climático.